Tres personas y el desmantelamiento de lo que se puede denominar como un macro invernadero y secadero de marihuana en una nave de un polígono industrial de Jaén capital es el resultado de la intervención de la Policía nacional. La nave que se ubicada en un polígono se encontraba cerrada, tapiada e insonorizada y con sus ventanas también tapiadas para así evitar el olor que desprenden las plantas.
La alarma de esta situación salta al recibir diferentes informaciones sobre la existencia de un invernadero, constatando con la empresa suministradora de fluido eléctrico, el altísimo consumo que se estaba defraudando, tanto a la compañía como a los ciudadanos.
La operación denominada Quiebracántaros, por ser este polígono donde se encuentra la nave, se ha saldado con la detención de tres personas y la incautación de 1.415 cogollos de marihuana secados y listos para su dosificación. El complejo contenía 127 lámparas halógenas, dos máquinas industriales de aire acondicionado, una bomba de agua, además de dos depósitos de agua, diez ventiladores, así como miles de metros de cable eléctrico, más de 120 transformadores, conducciones de aire, material de cultivo y cientos de metros de conducción acuífera.
Con las informaciones recabadas por el Grupo de Estupefacientes constataron que la nave había sido alquilada por una de las arrestadas, residente en una localidad de la provincia de Granada en el pasado mes de marzo. En dicha nave, los arrestados junto a otros, presuntamente habían adecuado el recinto con el fin de instalar un macro invernadero de plantas de cannabis sativa. Para ello diseñaron una compleja red de riego e instalaciones eléctricas de grandes dimensiones, constatando las frecuentes entradas y salidas de los detenidos, en especial a unas horas donde la actividad laboral es nula.