Reyes destaca el interés del informe de coyuntura del sector oleícola para saber por dónde debe caminar en el futuro

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CÁTEDRA CAJA RURAL

El presidente de la Diputación de Jaén, Paco Reyes, ha participado esta mañana en la presentación del Informe Anual de Coyuntura del Sector Oleícola correspondiente al año 2024, que ha valorado como “importante” para saber por dónde debe caminar esta actividad económica en el futuro. Este estudio, que ha sido elaborado por la Cátedra Caja Rural de Jaén José Luis García-Lomas Hernández de Economía, Comercialización y Cooperativismo Oleícola’ de la Universidad de Jaén (UJA), está dividido en cinco partes en las que se analizan, entre otras cuestiones, la situación actual de los mercados, la demanda, la oferta, la aplicación de las nuevas tecnologías o cuestiones como la aplicación de la PAC y el momento que vive el oleoturismo en la provincia.

Sobre esta publicación, Reyes ha querido “felicitar a la Universidad de Jaén y a la Caja Rural por apoyar una iniciativa como este informe de coyuntura que, año tras año, estamos esperando y que debe ser el vademécum para las administraciones, el sector del olivar y la sociedad jiennense en general”. Al respecto, ha subrayado que “aunque en los últimos años hemos avanzado en la diversificación de nuestra economía, la agricultura y el olivar siguen siendo fundamentales para muchas familias, y también para que nuestros pueblos sigan siendo pueblos vivos, de ahí el interés que tiene este documento”.

En esta línea, también ha agradecido al coordinador de esta publicación, el profesor Manuel Parras, y a su equipo “esta información, estos datos que son claves no solamente para hacer una radiografía de la situación, sino también para orientarnos hacia dónde tenemos que ir”. Así, y entre otras cuestiones, Paco Reyes ha destacado que “nos debe ayudar a reflexionar sobre temas que son fundamentales, como el consumo, la agrupación de la oferta,  la necesidad de la profesionalización y el relevo generacional en nuestra agricultura”.

Para el presidente de la Diputación, “son caminos que están ahí en una provincia que ha dado pasos muy importantes en torno al olivar y al aceite de oliva, pero que tenemos que seguir sin bajar la guardia en relación a la calidad, con asignaturas pendientes en las que hay que avanzar”. Al respecto, ha mostrado su “preocupación por lo que está sucediendo en este momento con los precios, una coyuntura que está llevando ya a un precio en origen que está por debajo de los costes de producción”. Esta situación se produce, como ha aclarado, “cuando tenemos una buena campaña, una gran cosecha, algo que se nota en la cara de nuestros agricultores, pero hay que reflexionar sobre qué se puede hacer para mejorar esta cuestión, y ahí tenemos una publicación, un trabajo que hizo el profesor Parras de cómo se puede influir también en los precios desde el origen”.

Por su parte, Manuel Parras ha recordado que “el objetivo de esta Cátedra no es otro que transferir el conocimiento que adquirimos al sector oleícola para ver cómo está evolucionando”. De esta forma, el informe que se ha presentado hoy ofrece conclusiones como que “el sector olivarero jiennense ha dado una respuesta positiva a los ecorregímenes incluidos en la PAC, ya que se ha apostado por la sostenibilidad”, algo que se ha concretado en que “el sector en Jaén ha recibido 75 millones de euros de los 80 posibles”.

Para el responsable de esta publicación, “no se ha funcionado tan bien en las ayudas acopladas al olivar con dificultades específicas que aporta beneficios medioambientales” y también ha llamado la atención sobre el hecho de que el cooperativismo está perdiendo peso, y “habría que saber qué está pasando, que está fallando en la fidelidad al cooperativismo”. De igual modo, en este informe también se recoge que está creciendo la superficie mundial dedicada al cultivo del olivar y se hace un análisis de “qué está pasando con el consumo, con la demanda, sobre todo en España, donde este producto ha perdido mucha cuota de mercado”. En este sentido, Manuel Parras ha finalizado asegurando que, en su opinión, el futuro del sector “no está en Bruselas, sino en conseguir que el aceite de oliva se consuma en los restaurantes y los hogares”.