Hay que traer de nuevo la falta de respeto que por parte de algunos ciudadanos se tiene sobre el mobiliario urbano. En este caso se trata de la rotura de las puertas de acceso a lo que se conoce como la Huerta del Sordo que se rehabilitó hace unos años adecentando la última evidencia de la batalla de 1808. Esta mañana amanecían las puertas en el suelo, se ve que algunos ciudadanos «les molestaba» y las han arrancado de la estructura que circunda este espacio.