Retirada de 8.000 toneladas de neumáticos almacenadas en una finca cercana a Mengíbar

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La delegada, Soledad Aranda visita los trabajos y destaca la eficaz respuesta de la Consejería ante una acumulación de residuos que podría conllevar situaciones de riesgo para la población cercana y para la propia naturaleza.

La Delegación Territorial de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible trabaja en la retirada de 8.000 toneladas de neumáticos que se encuentran almacenadas en una finca cercana al núcleo urbano de Mengíbar. La retirada se realiza ante la imposibilidad de la empresa propietaria de la finca de acometer estas labores y la obligación de tener que ejecutarlas. Estos residuos se encuentran muy cerca de la población, lo que podría causar problemas en caso de incendio y también en una zona muy cercana al río Guadalquivir, que cuenta con alto valor ambiental y protección ecológica. De esta manera, la Administración actúa ante un problema de acumulación de residuos y atendiendo a las órdenes establecidas y marcadas por la propia legislación.

La delegada territorial de Agricultura, Ganadería, Pesca y Medio Ambiente, Soledad Aranda, ha visitado esta mañana la finca para supervisar la marcha de los trabajos de retirada. Tragsa es la empresa que se encarga de estas labores. Obedece así a un encargo de la Consejería de un proyecto que consiste en la retirada más de 8.000 toneladas de neumáticos y así prevenir una posible situación de riego para la población cercana. “La Administración cumple con su labor ante la situación generada por parte de la empresa propietaria de estos terrenos, que no tenía capacidad para acometer el mandamiento. Por eso, es la propia Administración es la que lo ejecuta para evitar problemas añadidos que podrían generarse ante esta acumulación de residuos”, afirma Soledad Aranda.

Los trabajos se desarrollarán durante 10 meses ante el importante volumen de neumáticos almacenados. Hasta el momento, ya han salido alrededor de 3.500 toneladas en 319 camiones de gran tonelaje, que parten rumbo a planta de reciclaje en función del tipo de neumático. Además, Tragsa se ha encargado de dividir la acumulación de este residuo para prevenir situaciones de riesgo que se podrían generar en caso de incendio. “De la situación inicial que encontramos a cómo está esta parcela en el día de hoy, se ve un considerable avance. No obstante, los trabajadores siguen con su labor para retirar estas montañas de neumáticos lo antes posible”, señala la delegada.

Además, Soledad Aranda explicó que el ritmo de retirada depende mucho de la capacidad de recepción de las plantas de reciclaje, ya que tienen otras entradas también y han de compaginar unas y otras dentro del proceso de reutilización de las ruedas usadas para convertirlas en nuevos productos dentro del proceso de reciclaje establecido.

La cercanía a la población y el riego ambiental han hecho que la Administración actúe. Se trata de un proyecto que puede rondar los dos millones de euros ante el enorme volumen de neumáticos almacenado y el coste logístico que requiere las labores de retirada.