El doctor y director del Departamento de Pedagogía de la Universidad de Jaén, el bailenense Eufrasio Pérez Navío, ha afirmado que los contextos de los estudiantes «son totalmente distintos» según el barrio en el que se ubique el centro educativo, por lo que ha pedido que «se tengan en cuenta estos aspectos» para planificar los contenidos docentes. Participa en un curso en la UNIA.
En una entrevista a Europa Press, el experto ha destacado las diferencias entre un alumno del barrio de las Tres Mil Viviendas de Sevilla, que pensará en «lo que va a comer», y uno del barrio de Salamanca de Madrid, que se preocupará de «dónde se va a ir de vacaciones». Pérez dirigirá esta semana un curso para la mejora de las competencias de los docentes mediante el proceso de enseñanza-aprendizaje en la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA), en Baeza (Jaén).
Según ha manifestado, el curso propondrá que el profesorado en ejercicio y el futuro que está estudiando, «mejore las competencias docentes para el proceso de enseñanza-aprendizaje de su alumnado». Así, ha señalado que «las nuevas tecnologías ya están aquí y que afortunadamente muchos profesores las utilizan en las aulas», si bien «a algunos, la formación en estas cosas les queda muy lejana porque se van a jubilar o porque no les interesa».
Además, «se pretende que la mejora del proceso de enseñanza-aprendizaje se tome también como una parte de divertimento a la hora de aprender, para que no sea siempre la lección magistral, el hacer actividades, sino que haya otro recurso para llegar al objetivo principal que es que el alumno aprenda», según ha sostenido.
El experto ha mencionado la necesidad de «dejar la parte conductista e irnos al aspecto cognitivo», es decir, «aprender sabiendo de lo que partimos –de lo que ya se sabe–, y a partir de ahí, seguir construyendo conocimiento». También ha opinado que «a lo mejor no es adecuado poner muchos deberes», si bien, ha defendido que «depende de los contextos».
En cuanto a la formación del profesorado, Pérez se ha mostrado tajante y ha incidido en que «no hay que relajarse al obtener una plaza en una oposición» ya que «es cuando verdaderamente se empieza la formación». Además, se ha congratulado de que «los docentes que imparten clase se preocupan y ocupan de su profesión» y adquieren nuevas competencias durante su etapa profesional.
«El profesor tiene que ir evolucionando y adaptándose a las circunstancias y a los nuevos tiempos. Esto es como la medicina. Un médico de ahora no interviene una operación con instrumentos que había hace cuarenta años, va evolucionando. Pasa exactamente igual en la educación», según ha ejemplificado.
Por otro lado, ha puesto en valor la función añadida del maestro, ya que «integra al alumno en la sociedad en la que le ha tocado vivir y, por supuesto, también a ser un buen ciudadano». Algo que ha identificado con mayor frecuencia en los colegios rurales, donde «se respetaba más» la figura del maestro, según ha descrito desde su experiencia personal.