Madrugadora jornada en el Ayuntamiento de Bailén para normalizar la constitución del nuevo Pleno Municipal que con un grupo político menos, inicia esta nueva etapa de cuatro años con el acuerdo PP-AIB, que se renueva otros cuatro años, parece ser que con mayores compromisos, con los mismos retos, que casi se empezaron hace cuatro años, por un lago la dotación a Bailén de un geriátrico, algo que se ha convertido en una reivindicación histórica, viene de la época de Gómez Huertas, ¡ya ha llovido! y que Bailén haya sido incapaz de darle la solución es para pensárselo. Otro de los grandes retos es poner en marcha el CTM, otra reivindicación que pasa a ser histórica después de que este proyecto viene desde el pasado siglo, ¡que manda narices!. Con estos grandes retos se iniciaba la nueva etapa de la Corporación bailenense con Luis Mariano Camacho, Víctor Abolafia y Nieves Rusillo como cabezas de sus correspondientes grupos.
Como es habitual, el salón de plenos se llenó de público, sobre todo familiares y amigos de los nuevos o renovados ediles, para presenciar en directo el inicio de una nueva etapa donde cada uno de los portavoces asumieron la responsabilidad salida desde las urnas, donde agradecieron a sus partidos el apoyarlos para encabezar las listas y a su familias el apoyo para seguir trabajando. Emotivo los discursos de Nieves y Chiqui y de responsabilidad de oposición (único grupo) del PSOE que le ofreció su mano al alcalde para trabajar en proyectos que sean interesantes para la localidad.
El nerviosismo de emoción de la joven Laura a la hora de jurar su cargo y el prometo o juro de unos ediles que se comprometieron a un mejor futuro para Bailén, que falta nos hace, porque Bailén, como queda expresado lleva años de retraso, y ahora hay que correr más que los demás para recuperar el tiempo perdido.