La Guardia Civil está investigando a un vecino de Bailén al que sorprendieron con trampas para cazar pajarillos conocidas en la zona como «Costillas» en el paraje de los Huertos de San Vicente en la pedanía guarromanense de Zocueca. Se le acusa de un delito que tiene que ver con la protección de la flora y de la fauna.
Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) batieron la explotación minuciosamente. Detectaron trampas instaladas entre las hileras de viñedos, y partir de ahí establecieron un dispositivo de apostadero. La idea era identificar al presunto autor de los hechos. El Seprona sorprendió al día siguiente a un vecino de Bailén que estaba retirando las trampas. Entonces portaba 21 costillas, junto con otras tantas especies silvestres atrapadas.
Los agentes retiraron las trampas e intervinieron tres rabilargos (Cyanopica cookii), 31 mirlo común (Turdus merula) y un gorrión común (Passer domesticus). Las aves han sido entregadas a la Delegación de Medio Ambiente de la Junta. Según señala la Guardia Civil, servirán para alimentar a las especies silvestres que hay en el Centro de Recuperación de Especies Amenazadas Crea Quiebrajano de Jaén.
